A raíz de las altas temperaturas de los últimos días las cuales provocaron un incremento de las consultas en las guardias hospitalarias, fuentes del Ministerio de Salud de la Nación advirtieron que se avecina una ola de calor que seguramente traerá serios trastornos en la salud de las personas.
¿Qué es el golpe de Calor?
El golpe de calor es un trastorno agudo. Es consecuencia de la exposición a temperaturas ambientales elevadas. Se presenta cuando la temperatura central del cuerpo se eleva y los mecanismos de defensa resultan inadecuados.
Debe tenerse especial cuidado con niños menores de cinco años y los ancianos porque tienen menor capacidad para regular la temperatura corporal, resultando ser la población más vulnerable. Quienes sufren enfermedades crónicas no transmisibles (por ejemplo, las lesiones cardiacas), tienen menor resistencia al golpe de calor.
Con temperaturas elevadas el corazón debe realizar un esfuerzo adicional, pudiendo resultar ello riesgoso.
El golpe de calor suele presentar como cuadro o síntomas transpiración copiosa, la piel caliente, roja y seca, el pulso acelerado, sed intensa con sensación de fatiga, dificultad para respirar, cara congestionada, dolores de cabeza, somnolencia, náuseas, calambres musculares y en algunos casos severas convulsiones y hasta pérdida de conocimiento. Por lo general el golpe de calor ocurre cuando la temperatura corporal rebasa los 40° centígrados y está acompañada de pulso fuerte y rápido. Este pronto se torna débil y a su vez comienza a disminuir la frecuencia respiratoria.
¿Qué precauciones debemos tomar en cuenta?
Es importante tener conocimiento que el golpe de calor debe ser tratado inmediatamente, porque puede provocar la muerte. Previo llamado a un facultativo, como primera acción preventiva se recomienda acostar a la persona afectada en un lugar fresco, bajo techo. En casos no muy graves, y si el paciente no tiene contraindicaciones, se le puede proporcionar bebidas que favorezcan la rehidratación, como café con azúcar o agua con sal (1 cucharada de sal por litro de agua).
Es necesario bajar la temperatura corporal con paños fríos o bolsas de hielo sobre la cabeza. Si la temperatura corporal de la persona aumenta rápidamente, se le debe quitar la ropa y aplicar baños de agua helada con una esponja mojada por todo el cuerpo, y luego cubrírlo con una sábana mojada en agua fría. Debe mantenerse fresco y mojado hasta que su temperatura corporal regrese a la normalidad.